Mis viejos tienen una Outlander K2 del 2009. Como están considerando venderla, preguntaron en la concesionaria en cuánto la tomarían y les contestaron que el precio lo castigarían un poco, porque se viene el nuevo modelo. Ahora, en el modelo 2014 cambia básicamente el peso del vehículo y la economía de combustible, pero las motorizaciones y potencias parecen ser las mismas.
Cuando estaba buscando el reemplazante de mi Impreza, mi pololo me sugirió chequear su clásico competidor, el Lancer...cuando vimos los frenos de tambor dijimos NEXT!. Se supone que los frenos de tambor traseros igual pueden salvar bastante, pero son matapasiones en un auto de ese precio (cuando lo coticé estaba aún más caro, así que lo del bono es verdad)